El Sultán Suleimán, dicho el «Magnífico» fue uno de los sultanes más importantes y poderosos del período Otomano, período que duró 600 años. Suleimán reinó entre el 1520 y el 1566.
Tanta es el aurea de poder y glamour alrededor del nombre del Sultán Suleimán que la televisión turca le dedicó una telenovela, «El Sultán Suleimán», que ha sido un éxito mundial.
La sultanomanía
No solo en Turquía sino también en Europa y Latinoamérica, se desencadenó una «sultanomanía» de modas y accesorios, sobre todo en lo que se refiere a joyería, ya que las joyas que muestran los personajes femeninos de la serie son verdaderas obras de arte.
Esto es así debido a que la fuente de inspiración han sido maravillosas piezas de orfebrería pertenecientes al período Otomano.
Las joyas del imperio Otomano se caracterizaban por ser de grande visibilidad. Su particular atención era celebrar las piedras preciosas naturales de grandes tamaños.
Se intentaba respetar el volumen original de la gema, por lo tanto los diseños se adecuaban a su forma.
Prevalecían los diseños floreales, lunas, soles, pájaros y ramajes con gran despliegue de bordes y filigranas.
Las mujeres de la corte de los sultanes usaban anillos en todos los dedos (incluidos algunos dedos de los pies), diademas en el cabello, pendientes, collares y gargantillas y los hombre destacaban joyería en sus cinturones, de los que también pendían puñales y espadas que eran en si verdaderas piezas de orfebrería. Además ostentaban grandes broches en sus turbantes, collares y hebillas de todo tipo.
En las joyas del período Otomano las gemas utilizadas eran los diamantes, los rubíes y esmeraldas como así también turquesas, cornalinas, amatistas, jades y topacios.
Una particularidad de este imperio es que el pueblo otomano esperaba de sus futuros sultanes no solo extrema habilidad guerrera y astucia gubernamental si no que exigía de ellos el ser competentes en un oficio.
Suleimán, fue el Sultán que hacía joyas, el Sultán que había elegido el oficio de orfebre y se dedicó al diseño de fabulosas joyas, con resultados espectaculares, que incluso hoy se pueden admirar.
¿Dónde se encuentran las joyas del Sultán Suleimán?
La mayor cantidad de piezas están hoy a la vista en varios salones del Museo Palacio de Topkapi, en Estambul, en las Tesorería del Palacio se muestra joyería que no estaba destinada a la gente común y destaca por su calidad superior.
Otras joyas del Sultán Suleimán se pueden admirar en el complejo Muradiye de Bursa, museo dedicado al arte del imperio Otomano proveniente de las diversas regiones geográficas que lo compusieron.
El anillo de la sultana Hürrem
La pieza que ha invadido el mundo de la joyería es la réplica del anillo que usa la sultana Hürrem en la famosa serie «El Sultán Suleimán».
La verdadera Sultana fue tan legendaria como el Sultán mismo debido a su historia inusual. Se sabe de ella que fue raptada por los tártaros cuando tenía diez años, de su lugar natal (que sería hoy la actual Ucrania) y fue vendida como esclava.
Debido a su hermosa cabellera naranja se la eligió como regalo para el harem del Sultán Selim I donde fue odalisca hasta la llegada de Suleimán el Magnífico, quién se enamoró de ella y contradiciendo una tradición de 200 años se casó con ella y le dio el título de «Haseki Sultán» que era equivalente a un título de princesa europea.
Nadie podía ofenderla porque era como ofender al mismísimo Sultán. Su poder y su esfera de influencia en los asuntos del estado originó la época conocida como el Sultanato de las mujeres. Fue un precedente único en la historia. Pues bien, en la serie la Sultana Hürrem recibe un enorme anillo de esmeralda a forma de gota rodeado de diamantes que incluso tiene un nombre.
¿Cómo se llama el anillo de la Sultana Hürrem?
Se lo conoce con el nombre de «anillo de la discordia», porque a partir del anillo se desencadenan cantidad de envidias, intrigas, venganzas, desapariciones y reapariciones.
¿Existió el anillo de la Sultana Hürrem?
Pues no, en realidad no se le conoce a la verdadera Sultana Hürrem ningún anillo semejante pero la historia de la telenovela esta escrita en función de la narración dramatúrgica que necesita una serie de televisión.
Lo que si es verdad, es que para diseñarlo, los creadores se basaron en una joya que se encuentra hoy en el Palacio Topkapi de Istambul en el pabellón de joyas del imperio Otomano.
Es una enorme gema central a forma de gota rodeada con doble borde de brillantes. La diferencia fundamental es que la gota principal no es una esmeralda, sino un descomunal diamante de 86 quilates que pesa alrededor de 17 grs.
Y se lo puede ver detrás de un vidrio blindado con dos guardias a cada lado! Si comparamos fotografías de ambas joyas: el anillo de la serie con la pieza del museo, veremos la indiscutible similitud.
Otra cosa: no olvidemos que en la serie de televisión el anillo de «gigantesca esmeralda y fila de diamantes», en realidad es una fantasía de zirconias cúbicas verde y blancas!
