El Laboratorio de Investigaciones Gemológicas (Lapege), considerado como el más moderno de su campo en Suramérica, fue inaugurado recientemente en Río de Janeiro
Precioso ejemplar de Aguamarina Santa María
Brasil es una tierra conocida en el mundo de la geología como una de las más ricas en Piedras Preciosas. Algunas de ellas establecidas en el mercado como gemas de mejor calidad en absoluto. Basta pensar en las estupendas variedades de Aguamarina. Se dice que Brasil es el país de esta gema por excelencia, ya que si bien se encuentran Aguamarinas en otros países éstas no alcanzan la tonalidad de azul piscina profundamente bello de los ejemplares de las famosas Aguamarina Santa María, Santa Teresa, o Sao Domingo, para citar tres tipologías de calidad superior provenientes de Brasil. También en Esmeraldas aporta Brasil excelente calidad, la Esmeralda Nova Era, por ejemplo está establecida en el mercado como Esmeralda superior y la Esmeralda Bahía tiene una posición en el ranking de calidad decididamente alto. Por lo tanto no es de sorprenderse que se haya inaugurado en Rio de Janeiro el Laboratorio de Investigación Gemológica “Lapege” considerado como el más moderno en su género.
El Lapege ha sido lanzado con el objetivo de mejorar el desarrollo del sector brasileño en la joyería, las gemas y la bisutería. Su director, el Dr. Jurgen Schnellrath, ve un brillante futuro de estos sectores en Brasil impulsado por el recién inaugurado Lepege, el cual es posible visitar y requerir informaciones acerca de sus funciones específicas.
Dicho Laboratorio ha sido equipado con material tecnológico de última generación para establecer con precisión el origen verdadero de la Piedras preciosas evitando de esta manera las imitaciones sintéticas. Una avalancha de piedras falsas e imitaciones sintéticas ha inundado el mercado de ventas de gemas en Brasil en los últimos siete años ocasionando intranquilidad en el mercado internacional. Schnellrath explicó en la ceremonia inaugural que uno de los grandes objetivos del Lepege era garantizar al comprador de gemas brasileras la autenticidad de las Piedras Preciosas identificando incluso su mina de proveniencia y de esa manera recuperar la confianza y la credibilidad del mercado brasileño de gemas y joyas en el exterior.
El nuevísimo espectrofotómetro fue sin duda la estrella de la presentación del nuevo Laboratorio. A ver, ¿qué es un espectrofotómetro y porqué se lo considera tan importante?
Es un instrumento usado en el análisis químico que sirve para medir, en función de la longitud de onda, la relación entre valores de una misma magnitud fotométrica relativos a dos haces de radiaciones y la concentración o reacciones químicas que se miden en una muestra. Esa es la definición de diccionario. ¿Habéis entendido? ¡Yo tampoco! Pero traducido al lenguaje de normales mortales este aparato es capaz de medir y comparar la cantidad de luz absorbida por una piedra determinada, es capaz de dar información sobre la naturaleza o el origen de la piedra e indica indirectamente cuales substancias se encuentran en su interior. O sea que si una gema, proveniente de una determinada mina ha sido tratada y se le han incorporado aditivos que no son originales de su estructura este aparato los detecta. En pocas palabras “identifica y caracteriza tanto piedras preciosas como metales preciosos” (y tengo la sospecha que además esté en grado de pelar patatas y encontrar el novio adecuado!)
El Dr. Schnellrath ejemplificó la utilidad de semejante maravilla tecnológica indicando que existen Diamantes de colores de un valor de 454.000 dólares el quilate y se ha verificado que en muchas ocasiones ese color ha sido introducido artificialmente, por lo tanto se trata de una falsificación. El nuevo equipo es capaz de identificar este tipo de fragües.
El objetivo que se ha impuesto el Lapege es establecer un acuerdo de colaboración con el Instituto Brasileño de Gemas y Metales Preciosos – IBGM – y convertirse en el encargado de la emisión de los certificados de autenticidad de las joyas y las piedras preciosas.
Según el IBGM, el sector brasileño de gemas y joyas genera 350.000 empleos directos en el país y en 2012 registró una facturación de 7.500 millones de reales (alrededor de 3.409 millones de dólares). O sea que estamos hablando de una industria que impulsa la economía del floreciente Brasil y que a partir de ahora emerge al mundo con productos de lujo, calidad y gran belleza con la certeza absoluta de su autenticidad.
