La reina Letizia se ha convertido en icono de la moda desde que era la prometida del entonces futuro rey de España, Felipe VI e hijo del Rey Juan Carlos en esa época. Establece tendencias y siempre la prensa está atenta a sus atuendos y – sobretodo – a las joyas que la reina Letizia elige usar en cada ocasión.
Letizia se ha caracterizado siempre por su elegancia sobria, con un toque de chic moderno que la cae muy bien. Sabe elegir de maravillas la joya adapta al evento en cuestión y para ello se sirve en ocasiones protocolares del generoso muestrario de las joyas de pasar.
¿Qué quiere decir joyas de pasar?
Pues son las joyas de la corona, o sea que no son joyas privadas, sino que al pertenecer a la corona «pasan» a la próxima generación real. Las joyas de pasar de la corona las confirmó en inventario por primera vez la reina Victoria Eugenia pero fue Maria de las Mercedes de Borbón (la madre del rey Juan Carlos) quién acuño el término joyas de pasar para denominarlas.
¿Qué es un collar de chatones?
En esta fantástica colección de joyas – que quitan el aliento – se encuentra el collar de chatones, con enormes diamantes redondos (de 90 quilates) que están engastados en placas de platino con diminutas garras, que al casi no verse, le dan el absoluto protagonismo a los diamantes que brillan estupendamente.
Junto al collar de chatones Letizia lleva muy a menudo un par de aretes de chatones que le sientan de maravillas con el cabello recogido. Completa el conjunto con un brazalete de igual diseño.
Se cree que dicho brazalete de chatones fue hecho con una parte del collar, ya que éste originalmente era más largo. Lo sabemos porque la reina Sofía lo usaba asiduamente y efectivamente se lo veía más largo.
Las tiaras que usa la reina Letizia
Otras de las piezas fundamentales en la indumentaria joyera de la reina Letizia son sus diademas, cada cual más bella. Letizia cuenta con siete diademas, todas hechas en platino, que ha lucido en diferentes ocasiones y cada una tiene un nombre para reconocerla, a saber:
La Prusiana, que es la diadema que usó en la boda y por este motivo una de sus favoritas, es de diseño helénico con diamantes y brillantes.
La Floral que como su nombre lo indica lleva diseño de flores, ramas y hojas cubiertos de diamantes.
La Princesa, que fue un regalo del rey en el 2009 en su quinto aniversario de boda cuenta con 450 brillantes y diez perlas australianas.
La Melleiro, también conocida como «la Chata», cuenta con diamantes y 7 perlas gigantes. Esta diadema era la preferida de la reina Sofía.
La Cartier, sumamente barroca con diez perlas de diferentes tamaños e innumerables diamantes. Esta tiara la llevó la infanta Cristina en la boda de Victoria de Suecia con Daniel Westling.
La Flor de Liz, que es conocida como la tiara real española «por excelencia» ya que simboliza a la monarquía. Innumerables diamantes de fabulosa belleza y diferentes tamaños engalanan las flores del Liz que forman el diseño de la diadema.
La Rusa, con infinidad de diamantes y perlas engastadas en bloques a forma de gotas invertidas de intensa belleza y opulencia.
El misterio de la tiara que la reina Letizia nunca se pone
Pero entre las joyas de Letizia se encuentra además una octava tiara que Letizia nunca llevó. Es un misterio, ya que nadie conoce el motivo por el cual la reina Letizia no la haya usado jamás.
Fue el regalo de bodas de la casa joyera Carreras y Carreras. La tiara fue realizada en oro amarillo, de tonalidad mate, cuenta con 27 diamantes y cinco perlas y su característica más importante es la filigrana central de diseño floral. Se sabe de ella, ya que la misma casa joyera Carreras y Carreras dio a conocer su regalo y apareció la foto en artículos y notas varias.
No hay que darle demasiadas vueltas al misterio de la tiara que Letizia nunca llevó. Si se hiciera un inventario de las joyas que recibidas por Letizia como regalos de bodas, entraríamos en la cuenta que muchas son las que la reina no ha usado aún, como el bello colgante en forma de huevo de platino y brillantes que le regalara Maxim Voznesensky o la gargantilla y los pendientes de tradición en oro y filigrana que le regalara la Diputación de Cáceres, como así también el regalo del Ayuntamiento de Palma de Mallorca que fueron unos pendientes con la Cruz de Calatrava … y la lista de joyas aún por usar del joyero de Letizia aún contiua!
Por otro lado es también verdad que la reina Letizia no es ostentosa. LLeva las exuberantes piezas de joyería de pasar solamente en ocasiones oficiales. Siempre ha sido cuidadosa con su look, sobre todo en tiempos de crisis, donde ella es consciente que su conducta es vista como ejemplo por muchos.