De joyas y alfombra roja
Uno de los motivos por los cuales nadie quiere perderse la directa de los Óscar es por el glamur de la velada. Las estrellas despliegan un desfile de hábitos y accesorios que marcan tendencia. Y las joyas más deslumbrantes de la alfombra roja de los Óscar son un despliegue de belleza impactante.
Si bien esta última edición del premio Óscar ha estado marcada por el episodio de Will Smith dándole un cachetazo al presentador Chris Rock, el despliegue de joyas hermosas no se ha apagado por ello y merece la pena echar un vistazo y poner atención en las joyas más deslumbrantes de la velada.
Probablemente una de las joyas mas vistas y multiplicada por los medios son los extravagantes aretes que lució Jada-Pink Smith, lamentablemente no tanto por la joya en sí, sino por el lamentable incidente en el que se vio envuelta: el ya mencionado cachetazo de su marido Will Smith al presentador Chris Rock por haberse permitido éste hacer un chiste sobre la falta de cabello de Jada, debida a una enfermedad.
Pero concentrémonos aquí en sus extravagantes maxi aretes de Glenn Spiro, en titanio y diamantes, que fueron el perfecto acento a su despampanante atuendo verde firmado por Jean Paul Gaultier.
La noche de las esmeraldas
Vanesssa Hudgens lució joyas con esmeraldas de Bulgari. Es de remarcar la esmeralda central del collar, ya que se trata de una esmeralda colombiana de las minas de Muzo de mas de 23 quilates. Haciendo juego un par de pendientes y anillo del mismo diseño.
Nicole Kidman contrastó su bello vestido gris de Armani Privé con el espectacular collar Eagle, de diamantes amarillos de Harry Winston, que cuenta con 33,42 quilates de diamantes y engastado en oro amarillo y platino. Para completar el look llevó pendientes, pulseras y un anillo de diamantes a juego.
La gargantilla de perlas de Tracee Ellis Ross firmada por Niwaka, confirma que las perlas acentúan el glamur y son atemporales gracias a su elegancia y sofisticación. A juego con la gargantilla, un par de minipendientes con perlas le dieron a su rostro una luz particular.
Todas las miradas y los más elogiosos comentarios recibió Zendaya, no solo por su hábito totalmente inusual y moderno de falda de tiro largo con lentejuelas plateadas y larga cola combinada con una blusa de seda muy corta, sino por su espectacular parure de diamantes de la colección «Serpenti» de Bulgari que contaba en un collar en oro blanco con 13 quilates de diamantes, pulseras de serpientes que se enroscan en ambos brazos, anillos serpiente y pendientes. ¡Espectacular!
¿Y los diamantes? ¿Joyas más deslumbrantes?
También Lily James, la protagonista de ‘Pam & Tommy’ optó por diamantes de Bulgari, con una gargantilla que es un sueño en diamantes y que dieron el particular acento a su maravilloso atuendo rosa palo firmado por Atelier Versace.
Jessica Chastain llevó un vestido lila dorado de Gucci acompañado por joyería de la misma marca: un par de pendientes «chandelier» de 18 quilates de oro blanco, el brazalete contaba con la misma cantidad de oro blanco y el anillo, siempre en igual diseño cubría medio dedo. Los diamantes combinados con zafiros con destellos lila eran el perfecto accesorio para su vestido.
Los pendientes de Lupita Nyong’o no pasaron desapercibidos los cuales quedaron magníficos con su recogido de cabellos. Se trata de pendientes en diseño rossette de De Beers, con 5,48 quilates de diamantes blancos y rosados haciendo juego con un anillo, set de la colección ‘Reflections of Nature’.
La casa De Beers estuvo representada también en el conjunto de joyas de la actriz Ariana DeBose, que lució collar, pendientes, pulsera y anillos a juego en diamantes color D y limpios a lupa en platino.
Zoë Kravitz optó por el lujo romántico de una gargantilla de 36 quilates de diamantes rosas y blancos ovalados firmados Kwiat de absoluto glamur, que acentuaron su estilo «Audrey Hepburn» con un vestido muy femenino en tono rosado. El collar fue una de las piezas mas remarcables gemológicamente hablando.
¡Hasta el año próximo, con más glamur, joyas más deslumbrantes, más belleza y… algún que otro escandalete!
